Patton: Que Tierra Santa no sea un campo de batalla sino tierra de fraternidad y paz

El día de la fiesta del Bautismo del Señor, el Custodio franciscano presidió la misa a orillas del Jordán, en Al Maghtas, donde se encuentra el santuario dedicado a San Juan Bautista. Después de 57 años, se abrió el tránsito, antes minado, que conducía a la orilla del río.

Roberto Cetera - Al Maghtas

"A pocos metros del lugar donde Jesús fue bautizado, y cerca de donde sufrió la tentación, nos reunimos esta mañana para rezar con el fin de reconfirmar nuestra fe y pedir defensa contra las tentaciones, especialmente las que afligen a esta tierra: la injusticia, la violencia y la guerra". En una mañana de domingo extrañamente veraniega, el Custodio de Tierra Santa, el padre Francesco Patton, celebró la fiesta del Bautismo de Jesús, presidiendo en Al Maghtas, a orillas del río Jordán, una solemne Eucaristía, a la que asistieron varios centenares de fieles, a pesar de las restricciones de movilidad impuestas por la guerra en curso en Gaza.

Padre Patton en Al Maghtas, a orillas del río Jordán

Reabierto el tránsito del santuario de San Juan a orilla del Jordán

En su homilía, el Padre Patton recordó cómo los tres testigos del bautismo, agua, sangre y Espíritu, recuerdan también la cruz en la experiencia humana de Jesús. Una cruz que se abre a la vida eterna. Durante la ceremonia, también se administró el bautismo al pequeño Nicholas Giovanni, un niño de una familia cristiana de Jerusalén.

El bautismo de un niño de Jerusalén

Al final de la celebración, en medio de una conmoción generalizada, se abrió un portón que consiente el paso directo desde el santuario franciscano dedicado a San Juan Bautista hasta el pequeño santuario de la orilla del Jordán, a través de un paso que, al haber sido minado, ha permanecido cerrado desde la Guerra de los Seis Días de 1967.