Bo: La Iglesia en Asia en armonía con las religiones y la creación para construir la paz

Sor Bernadette Mary Reis - Bangkok

"¿Qué dice el Espíritu Santo a las Iglesias de Asia?". Los cerca de 200 obispos reunidos en Bangkok para la Conferencia General de la Federación de Conferencias Episcopales de Asia (FABC) intentan responder a la pregunta planteada por el Papa Francisco en su videomensaje de apertura. Los trabajos llegan a su fin: iniciada el 12 de octubre, la Conferencia -que celebra el 50º aniversario de la fundación de la Federación- concluye el domingo 30 de octubre con la publicación de un documento final.

Fortalecidos por el Espíritu

"Ciertamente, durante estas dos semanas y media aquí en Bangkok, sentimos que el Espíritu Santo nos está realmente conduciendo y guiando", dice a Vatican News el cardenal Charles Bo, arzobispo de Yangon y presidente de la FABC. "Estamos muy fortalecidos por la gracia del Espíritu Santo y sobre todo por la colegialidad, la fraternidad que hay aquí".

Cuna de las religiones

Asia, explica Bo, es un "continente bendito, cuna de todas las religiones". Los obispos, añade, han recibido una bendición del "suelo de Asia", de la variedad de culturas: "Estamos muy contentos de estar todos juntos aquí". "Al mismo tiempo", reconoce el cardenal, "Asia tiene muchos retos, la militarización, la nuclearización y todo lo demás. Asia está produciendo el mayor número de pobres".

Así que, aunque sea una "tierra bendita", no es fácil en el continente asiático avanzar hacia la "construcción de la paz". "Creo que el Espíritu Santo está llevando a Asia a construir la paz", dice el cardenal. "Construir la paz, el diálogo o la reconciliación es una nueva palabra para la nueva evangelización. Esto es especialmente necesario.

Problemas de violencia y militarización

"El paso hacia el que el Espíritu Santo está llevando a toda Asia es desafiante", explica, y cita algunos países de la zona "donde hay mucha violencia y pasos hacia la militarización". Están ocurriendo muchas cosas. Hay diversidad, pero también división". "El Espíritu Santo nos está conduciendo hacia la paz y la reconciliación", insiste Bo. "No olvidemos el pasado. Los padres fundadores de esta FABC ya marcaron el camino, nos dieron la vía del triple diálogo - triple diálogo o triple armonía - armonía con los pobres, armonía con las religiones y armonía con la cultura. A esta armonía hay que añadir ahora la armonía con la ecología, con la naturaleza. Con estos cuatro diálogos, la Iglesia en Asia construirá la paz en esta parte de Asia".

La llamada a la paz para todos

El llamamiento no es sólo para los obispos, sino para "todos los asiáticos, toda la Iglesia, todos los bautizados": todos deben "construir la paz en su país". "Es un gran reto porque después de 2.000 años seguimos siendo el 2%", dice Bo. "Aunque seamos una minoría, somos la sal de la tierra y la luz del mundo".