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La Basílica de la Natividad en Belén La Basílica de la Natividad en Belén 

Patton: Que en Oriente Medio se vuelva a razonar de manera diplomática

El Custodio de Tierra Santa relata los pequeños pero importantes pasos hacia el acercamiento entre israelíes y palestinos, mientras Belén vuelve a abrirse a los peregrinos: los cristianos "podrán volver a vivir de su trabajo".

Francesca Sabatinelli - Ciudad del Vaticano

Reactivar el diálogo directo entre israelíes y palestinos "para alcanzar la solución de los dos Estados" y preservar el estatus de Jerusalén, Ciudad Santa para las tres religiones monoteístas. Así se destacó durante el encuentro entre el Papa y el Presidente del Estado de Palestina, Mahmoud Abbas, recibido en el Vaticano. Las últimas y gravísimas violencias entre israelíes y palestinos se remontan al pasado mes de mayo, cuando en 11 días, del 10 al 21 de mayo, estallaron las protestas contra el desalojo de familias palestinas de Sheikh Jarra, un suburbio de Jerusalén Este, y luego se convirtieron en ataques aéreos y cohetes entre Israel y Hamás. Desde entonces la situación ha cambiado, aunque poco, la tensión sigue presente pero el gobierno israelí ha cambiado, con la instalación, el pasado 13 de junio, del actual ejecutivo encabezado por el primer ministro Naftali Bennet, como confirmó el padre Francesco Patton, Custodio de Tierra Santa.

Padre Patton, ¿cuál es la situación de las comunidades israelí y palestina en la actualidad, tras la violencia del pasado mes de mayo?

La situación, desde cierto punto de vista, ha cambiado levemente desde los enfrentamientos entre Gaza e Israel del pasado mes de mayo. La novedad es que se ha formado un nuevo gobierno (en Israel) y yo añadiría también el hecho de que ha habido varias conversaciones más o menos secretas o más o menos conocidas entre miembros del gobierno israelí y miembros de la Autoridad Nacional Palestina. Una de ellas tuvo bastante resonancia, la reunión entre el ministro Benny Gantz (ministro de Defensa israelí) y el presidente Abu Mazen (en Ramala, Cisjordania, el 29 de agosto). La situación actual sigue estando fuertemente condicionada, por supuesto, tanto por el contexto como por un diálogo oficial aún no reabierto. Luego está, sin duda, el condicionamiento debido al contexto de la pandemia y el vinculado a la reanudación de los asentamientos. Son elementos que, en cierto modo, no ayudan a tranquilizar las cosas y al diálogo, pero yo diría que, a pesar de todo esto, probablemente se han dado algunos pequeños pasos en los últimos meses y ninguno de nosotros sabe todo lo que las autoridades israelíes y palestinas pueden haberse dicho mutuamente en modo reservado.


El Papa, con respecto a la situación en Oriente Medio, siempre ha insistido mucho en la necesidad de diálogo...

Por supuesto, sabemos que cuando hay encuentros con el Papa, Francisco insiste mucho en la importancia de encontrar soluciones pacíficas a través de la diplomacia, de los acuerdos. Por supuesto que lo dice a nivel del Magisterio, basta pensar en la encíclica Fratelli tutti, y también lo dice con gestos concretos y cotidianos, basta pensar en los realizados en estos días, con motivo de la fiesta de los difuntos, con su "no" tan fuerte a toda forma de guerra, de violencia, de armamento. Así que creo que el Papa Francisco seguirá impulsando el diálogo entre las autoridades israelíes y palestinas. Y todos esperamos que el diálogo se desbloquee realmente y que, poco a poco, volvamos a razonar de forma diplomática, y no por otros medios.

Francisco, junto a los repetidos llamamientos a la paz, también ha invocado el camino del perdón. ¿Cuánto más difícil es esto?

Yo diría que el camino del perdón indicado por el Papa es el indicado en la encíclica Fratelli tutti, donde Francisco dice que hay que saber combinar la verdad con la justicia y el perdón, por lo tanto, está claro que el perdón no va solo. El Papa dice en la encíclica: el perdón no anula el recuerdo de los hechos y el tener el valor de una reconstrucción histórica suficientemente objetiva. Y este es uno de los problemas a nivel local, porque la forma de contar la historia es a menudo una forma que tiende a excluir al otro, por lo que tenemos que aprender, incluso a nivel local, a acercarnos a la verdad de los hechos, a la verdad de la historia, con cierta serenidad, quitando las gafas de la ideología, diría que de ambos lados.

A partir del 6 de noviembre, Tierra Santa se prepara de nuevo para acoger a los peregrinos, que también podrán volver a dormir en Belén tras la larga pausa impuesta por Covid. Será un momento importante volver a trabajar para los palestinos y sobre todo para los cristianos...

Esto significa mucho, sobre todo para la gobernación de Belén, para la zona de Belén, que es sin duda la más afectada por la ausencia de peregrinos, con todos los alrededores, el Campo de los Pastores, Beit-Sahur, Beit Jala. Yo diría que esta reapertura es una señal extremadamente positiva, significa que la gente de Belén, y especialmente los cristianos, podrán volver a ganarse la vida con su trabajo, tanto los que trabajaban como guías, como los que trabajaban en los hoteles, como los que hacían pequeños objetos de devoción y luego los vendían a los peregrinos. Así que, desde este punto de vista, diría que es una señal muy positiva de ayuda y apoyo a la parte más débil, que es precisamente la población cristiana de Belén. Además, yo diría que sería una Navidad muy triste para Belén encontrarse, por segunda vez consecutiva, sin poder celebrar el nacimiento de Jesús junto con los peregrinos de todo el mundo, porque en la época de Navidad, que de hecho en Belén ya empieza con el Adviento -a finales de noviembre, principios de diciembre-, se respira realmente un aire de gran alegría, de gran vitalidad, y esto es algo que se prolonga prácticamente durante todo el mes de enero. Es un poco como si en Belén los meses de diciembre y enero, con los distintos calendarios, oriental y occidental, y con las distintas liturgias, la nuestra, la de los griegos, la de los armenios, fueran dos meses de Navidad, en los que la gente celebra de verdad, no sólo por el nacimiento de Jesús, sino porque así puede expresar con más fuerza su propia identidad cristiana.

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05 noviembre 2021, 11:00