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Cardenal Daniel Sturla, Arzobispo d Montevideo (Uruguay) en el Aula Pablo VI del Vaticano. (Foto de archivo). Cardenal Daniel Sturla, Arzobispo d Montevideo (Uruguay) en el Aula Pablo VI del Vaticano. (Foto de archivo).

Uruguay. Cardenal Sturla: Salir al encuentro y predicar la alegría de la fe

Una Carta Pastoral para reflexionar sobre el misterio de Jesús que nos salva, nos alimenta como Pan de Vida y nos acompaña hasta el fin de los tiempos, ha sido publicada por el Arzobispo de Montevideo, en momentos en que el mundo cambia la forma de pensar, de sentir, de vivir, cuando la fe se está "enfriando".

Alina Tufani - Ciudad del Vaticano

“¿Qué quiere decir que Jesús nos salva? ¿De qué nos salva?”. Desde estas preguntas parte la reflexión del Cardenal Daniel Sturla, Arzobispo d Montevideo (Uruguay) en su Carta Pastoral "Devuélveme la alegría de tu salvación", publicada en tiempos en que los cambios culturales donde campea "ola glacial secularizadora", donde la fe "se va enfriando". Recuperar el sentido integral de la salvación frente a la secularización que se ha dado de ella, incluso en la vida cristiana, es el “punto clave” de las 87 páginas que contiene el documento presentado esta semana en Montevideo.  

“No es novedad saber que estamos inmersos en un cambio cultural de grandes proporciones que modifica la forma de pensar, de sentir, de vivir. Esto que se da en todo el mundo 'occidental' llega también a nosotros. Parte de este cambio es constatar que la fe se va enfriando cada vez más en la vida de nuestra gente. Como una nueva ola glacial secularizadora que ya no vemos solo de fuera, sino que ha ido penetrando en la misma Iglesia, es decir, en nosotros”, se lee en la introducción de la Carta Pastoral.

Aportar una visión personal y pastoral sobre las dificultades y las esperanzas que percibe entre los fieles para anunciar de modo más eficaz el don de la salvación, es en sustancia el contenido de la Carta Pastoral.

“La secularización no trae alegría ni felicidad al corazón humano” afirma el Cardenal Sturla, al constatar que esa búsqueda permanente de felicidad, tapada muchas veces por el consumismo y el hedonismo, “nos desafía a testimoniar la alegría de la salvación, el gozo de la libertad cristiana”. Y añade: “La fe es portadora de felicidad. Sin saberlo es lo que todos los hombres buscan. Jesucristo es el Salvador y estamos llamados a acoger este don”.

La intención del Purpurado, como él mismo señala, no está ligada a la pandemia que actualmente vive el mundo, sus consecuencias o vicisitudes, sino a “un deseo de iluminar el camino” que, sin embargo, está abierto al debate, al intercambio, dispuesto a llenarse de “ánimo y coraje” para llevar adelante la misión de discípulos-misioneros de Jesús el Señor y Salvador.

“Siento que debemos responder a ese clamor y salir al encuentro de nuestra gente, especialmente de los más pobres, y predicar a tiempo y a destiempo la alegría de la fe y el don de la salvación. Esto implica una evaluación realista y sincera, una conversión de nuestro corazón y una puesta a punto de algunos elementos de nuestra marcha pastoral”, escribe el Purpurado uruguayo.

El documento presenta 10 capítulos, más la introducción y las conclusiones. "El deseo y la necesidad de escribir sobre la salvación" es el tema que abre la reflexión personal del Cardenal Sturla. Los capítulos del libro dan la pauta de lectura: La entrega en la misión y la escasez de frutos; El Señor se ha fiado de nosotros; El don del Concilio Vaticano II y la dificultad de su aplicación; Custodiar la fe frente al peligro de la autosecularización; Tres propuestas de conversión pastoral; El combate de la fe: defender la fe de los sencillos; Hay victoria en el nombre de Jesús; El esfuerzo misionero y la confianza en la gracia que actúa; y La esperanza de la fe.

Antes de la firma, el Cardenal Sturla recuerda que vale la pena gastarse por Jesucristo y el evangelio. “Remar y remar – escribe - como estamos acostumbrados en nuestra Iglesia, en la certeza de que el Señor enviará a su tiempo la brisa favorable”. “Vamos hacia el encuentro con el Señor, ¡ven Señor Jesús!”, concluye.

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21 julio 2021, 10:30