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Obispos de Uruguay contra el proyecto ley de eutanasia: "matar no es un derecho"

En una nota publicada en el sitio web de la Conferencia Episcopal (CEU), firmada por Monseñor Pablo Galimberti, obispo emérito de la ciudad de Salto, se subraya que "matar no es un derecho" y que "el derecho a la vida continúa hasta la muerte natural".

Ciudad del Vaticano

En Uruguay se está debatiendo ampliamente un proyecto de ley sobre la eutanasia y el suicidio asistido. En este contexto destaca la contundente respuesta de los obispos: "matar no es un derecho".

Quien destruye una vida comete un asesinato

En una nota publicada en el sitio web de la Conferencia Episcopal (CEU), firmada por Monseñor Pablo Galimberti, obispo emérito de la ciudad de Salto, se subraya que "matar no es un derecho" y que "el derecho a la vida continúa hasta la muerte natural".

 

"Quien destruye una vida - continúa explicando la nota - comete un asesinato, incluso si se disfraza de compasión". Aprobar tal propuesta, de hecho, significa "condenar, en nombre de la sociedad de consumo", a los ancianos y a los enfermos, que se verían "privados del derecho a concluir su vida humana con dignidad".

Los derechos humanos no son invención de los legisladores

Asimismo el Episcopado uruguayo hace otra observación: "Hay un error fundamental: algunos piensan que los derechos humanos son una invención de los legisladores. En realidad, forman parte de nuestro ADN desde que nacemos: son intrínsecos al hombre"; el legislador se limita a "reconocerlos y hacerlos explícitos". De ello se deduce -dicen los obispos- que "el respeto de un derecho no deriva de una ley votada en el Parlamento".

Por último, Monseñor Galimberti recuerda el Catecismo de la Iglesia Católica que, en el número 2.277, afirma:

“Sean cuales fueren las razones y los medios, la eutanasia (...) es moralmente inaceptable (...) Una acción u omisión que, por sí misma o intencionadamente, causa la muerte para poner fin al dolor, constituye una matanza gravemente contraria a la dignidad de la persona humana y al respeto del Dios vivo, su Creador”

No es ético causar la muerte de un enfermo

Hay que recordar que ya en el mes de junio, al final de su Asamblea Plenaria, la CEU emitió una declaración en la que reiteraba: "No es éticamente aceptable causar la muerte de un enfermo, ni siquiera para evitar el dolor y el sufrimiento, aunque lo pida expresamente".

"Ni el paciente, ni el personal médico, ni los miembros de la familia tienen el poder de decidir o de causar la muerte de una persona - se afirmó en la nota - tal acción constituye una especie de asesinato cometido en un contexto clínico". Al mismo tiempo, la CEU dejó claro que "tampoco es éticamente aceptable el ensañamiento terapéutico que consiste en querer prolongar la vida del paciente a toda costa, sabiendo que no se le ofrece ningún beneficio".

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27 julio 2020, 16:58