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Celam: consagren sus países a la Virgen de Guadalupe

Monseñor Miguel Cabrejos Vidarte, Presidente del Consejo Episcopal Latinoamericano (CELAM) y Presidente de la Conferencia Episcopal Peruana, y Monseñor Juan Carlos Cárdenas, Secretario General del CELAM, propusieron en una carta enviada este 23 de marzo, a los presidentes de las Conferencias Episcopales de América Latina y el Caribe que consagren sus Naciones a la Santísima Virgen María, Nuestra Señora de Guadalupe, ante la crisis sanitaria producida en todo el mundo por la propagación del Coronavirus (COVID-19).

Ciudad del Vaticano

Ante la víspera de la Solemnidad de la Anunciación del Señor, el Celam propone a todas las Conferencias Episcopales a realizar un acto de consagración a la Santísima Virgen María, Nuestra Señora de Guadalupe. Un acto se lee en el documento, que irá acompañado del rezo del Santo Rosario, y será transmitido por los medios de comunicación y las redes sociales, para que, se lee, llegue al mayor número de sacerdotes y fieles.

El documento recuerda la difícil situación que vive el mundo ante la expansión del Covid-19, llevando a los gobiernos a tomar medidas drásticas ante el creciente número de contagiados y de fallecidos. Al mismo tiempo, “esta crisis sanitaria ha despertado entre obispos, sacerdotes, religiosos (as) y laicos un esperanzador movimiento, usando creativamente los medios de comunicación y las redes sociales para acompañar al pueblo de Dios, confinados en sus casas, llevándoles mensajes de aliento y esperanza”, se lee en documento.

El Celam alienta a sus obispos ante la difícil situación sanitaria global.  El organismo recordó que el pueblo de Dios, siempre, en “momentos críticos, como pestes y guerras, han suplicado con confianza la maternal protección de la Madre de Jesús”.

Finalmente, la carta expresa que "esta iniciativa será un gesto poderoso de fe y de esperanza en momentos donde hay temor e inquietud".

Al final el organismo ha propuesto esta oración:

Oración a la Virgen de Guadalupe Santísima Virgen María de Guadalupe, Madre del verdadero Dios por quien se vive.

En estos momentos, como Juan Diego, sintiéndonos "pequeños" y frágiles ante la enfermedad y el dolor, te elevamos nuestra oración y nos consagramos a ti.

Te consagramos nuestros pueblos, especialmente a tus hijos más vulnerables: los ancianos, los niños, los enfermos, los indígenas, los migrantes, los que no tienen hogar, los privados de su libertad.

Acudimos a tu inmaculado Corazón e imploramos tu intercesión: alcánzanos de tu Hijo la salud y la esperanza.

Que nuestro temor se transforme en alegría; que en medio de la tormenta tu Hijo Jesús sea para nosotros fortaleza y serenidad; que nuestro Señor levante su mano poderosa y detenga el avance de esta pandemia.

Santísima Virgen María, "Madre de Dios y Madre de América Latina y del Caribe, Estrella de la evangelización renovada, primera discípula y gran misionera de nuestros pueblos", sé fortaleza de los moribundos y consuelo de quienes los lloran; sé caricia maternal que conforta a los enfermos; y para todos nosotros, Madre, sé presencia y ternura en cuyos brazos todos encontremos seguridad.

De tu mano, permanezcamos firmes e inconmovibles en Jesús, tu Hijo, que vive y reina por los siglos de los siglos.

Amén.

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24 marzo 2020, 13:27