Agricultor en el estado de Tamil Nadu, en India. Foto de archivo Agricultor en el estado de Tamil Nadu, en India. Foto de archivo 

El Papa: En el mundo del derroche de comida, construir un sistema agrícola integrador

El Papa escribe a los participantes en la 47ª sesión del Consejo de Gobernadores del Fondo Internacional de Desarrollo Agrícola: el hambre y la miseria deben afrontarse sin conformarse con "estrategias abstractas o compromisos inalcanzables, sino cultivando la esperanza que brota de una acción colectiva".

Alessandro De Carolis - Ciudad del Vaticano

Derroche de unos pocos y millones acosados por el hambre, cuando "un racionamiento correcto bastaría para alimentar a todos los que pasan hambre". Francisco habla de agricultura al escribir a la Junta de Gobernadores del Fondo Internacional que se ocupa del desarrollo del sector y pone el dedo en la llaga no resuelta y a menudo denunciada. "Los alimentos que cada año se desperdician generan masas de gases con efecto invernadero", señala el Papa, que habla de "tiempos de precariedad" y advierte: "Estamos llevando el mundo a límites peligrosos: el clima está cambiando, los recursos son expoliados; los conflictos y la crisis económica amenazan la subsistencia de millones de personas. Ante la crisis, las comunidades rurales son las primeras damnificadas".

Indefensos

El problema para estos pequeños grupos, afirma Francisco, es que "no cuentan con recursos para hacer frente a la situación producida por el cambio climático y las hostilidades, y se ven excluidas del acceso a la financiación". En este horizonte, prosigue, se incluyen los pueblos indígenas, “víctimas de penalidades, privaciones y atropellos", las mujeres, pilares de "más de la mitad de los hogares que sufren inseguridad alimentaria", y los jóvenes, en quienes "reside un importante potencial de innovación y de cambio positivo".

Acción colectiva

Para afrontar el hambre y la miseria, escribe claramente el Papa, no hay que conformarse con "estrategias abstractas o compromisos inalcanzables, sino cultivando la esperanza que brota de una acción colectiva". Y esa colaboración, es su esperanza, debe tener como objetivo "la construcción de un sistema agrícola y alimentario más integrador", con programas de investigación y tecnología "que favorezcan una agricultura sostenible y respetuosa del medio ambiente". Para “suprimir el dispendio de alimentos y abogar por una distribución equitativa de los recursos”, Francisco apunta a inversiones "en transporte y almacenamiento" que puedan "reducir las pérdidas de los pequeños agricultores, que producen un tercio de los alimentos que se consumen a diario". Que sus propuestas y acciones, es el llamamiento final de Francisco al Fondo, " reflejen los valores universales de la justicia, la solidaridad y la compasión, y sean orientadas al bien común y al trabajo por la paz y la amistad social".

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15 febrero 2024, 10:18