Arzobispo Bernardito Auza. Arzobispo Bernardito Auza. 

Mons. Auza: “El corazón del Estado de Derecho reside en respetar los derechos humanos”

“El corazón del Estado de Derecho reside en el respeto de todos los derechos humanos reconocidos internacionalmente”, así lo expresa Monseñor Bernardito Auza, Jefe de la Oficina de Misión Permanente de la Santa Sede ante la Organización de la Naciones Unidas.

José Villanueva – Ciudad del Vaticano

En su intervención durante la Sexta Comisión del Punto 86 del orden del día sobre “El estado de derecho a nivel nacional e internacional”. El Arzobispo Bernardito Auza, menciona que para el Santa Sede la promoción del estado de derecho se basa en el cumplimiento del respeto de los derechos de todos los ciudadanos, lo cual debe encaminar a un ambiente de fraternidad universal, para todos los países miembros que conforman las Naciones Unidas.

 

“La Asamblea General en su resolución 72/119, hizo eco sobre el discurso hecho por el Papa Francisco en 2015, donde el Pontífice enfatizó que el trabajo de los Estados Naciones puede verse como el desarrollo y la promoción del estado de derecho, basado en el darse cuenta de que la justicia es una condición esencial para lograr el ideal de la fraternidad universal”, dijo el Arzobispo citando las palabras del Papa.

En ese sentido, continua el Nuncio, “la Santa Sede acoge con satisfacción el reconocimiento de esta Asamblea de que el estado de derecho a nivel internacional y los niveles nacionales ofrezcan una base firme para un “mundo pacífico, próspero y justo.

Respeto y cumplimiento de la Carta de los DD.H.H.

El Purpurado resalta que la justicia debe ser la base fundamental que motive a todos los estados andar en el camino para cumplir el Estado de Derecho. En ese sentido, Arzobispo Auza alude a la Carta de la ONU que recuerda la importancia del respeto a los derechos humanos que tiene todo ciudadano.

“La Carta de las Naciones Unidas afirma la naturaleza fundamental de los derechos humanos en sí mismos como un medio esencial para lograr los pilares complementarios de la paz y la seguridad, el desarrollo y el estado de derecho en las Naciones Unidas.  Siendo ratificada la Carta ratificada por los Estados, donde se comprometen a tomar acciones conjuntas y separadas para “Promover el respeto universal y la observancia de los derechos humanos y las libertades fundamentales para todos, sin distinción de raza, sexo, idioma o religión”.

Cumplir los objetivos de la Agenda 2030

Como último punto, el Observador Permanente de la Santa Sede ante la ONU, recuerda que dentro de los objetivos de la Agenda 2030 de la ONU para el Desarrollo sostenible; todos los Estados están en la obligación de garantizar a sus ciudadanos el respeto de sus derechos y a tener acceso a justicia digna.  

“El imperio de la ley solo puede ser efectivo si la observancia de los derechos humanos se basa en los adecuados procedimientos e instituciones “efectivos, responsables e inclusivos” a nivel nacional, como los reconocidos para la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible. En consecuencia, los Estados deben facultar a las instituciones nacionales las obligaciones que tienen para con los derechos humanos y eliminar cualquier obstáculo procesal que con demasiada frecuencia niegue los remedios efectivos a las víctimas de violaciones de derechos humanos. Los Estados también deben garantizar que abogados, jueces y defensores de los derechos humanos garanticen el cumplimiento interno de los derechos humanos y pueden ejercer libremente sus deberes profesionales de conformidad con las normas aplicables”.

 

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11 octubre 2018, 13:57