Athletica Vaticana entregará la "Copa de los Últimos"
por Giampaolo Mattei
La Copa de los Últimos es la novedad del Maratón de Roma que se correrá el domingo 19 de marzo. "Para contribuir a hacer visibles a los invisibles que, con los maratonianos, comparten las calles de la ciudad", el Osservatore di Strada y Athletica Vaticana premiarán al último corredor en el paso de la Plaza Pío XII – Plaza de San Pedro (en el km 16 de la carrera, cuando faltan 26 para la llegada a los Foros Imperiales).
Erwin Alfredo Bendfeldt Rosada
La Copa de los Últimos – presentada ayer por la mañana en el Capitolio durante la rueda de prensa oficial del Maratón – fue creada por Erwin Alfredo Bendfeldt Rosada, de origen guatemalteco, que vive en el centro de acogida de Cáritas en Ponte Casilino.
Erwin Alfredo, artista con un exitoso pasado, quiso expresar con la Copa de los Últimos "un mensaje de inclusión de los más frágiles y de esperanza". Con una vida aventurera entre la selva y las aulas universitarias, "en mi país – dice – incluso me pegaron un tiro en la cabeza por mi compromiso social: creyéndome muerto, me arrojaron a una fosa común donde me encontró y me salvó un cura que había ido allí a bendecir los cadáveres".
La Copa de los Últimos es una de las muchas iniciativas concretas de solidaridad promovidas, con motivo del Maratón de Roma, por Athletica Vaticana también junto con la comunidad de San Egidio – en particular con el centro de acogida Palazzo Migliori – y el dispensario pediátrico vaticano Santa Marta. Además, el número de marzo del Osservatore di Strada, enteramente dedicado al deporte, publicó una "carta abierta" de los pobres de Roma a los maratonianos. Por una alianza fraternal que sugiere compartir las calles: para los atletas son un "gimnasio", para los pobres son su casa.
El jueves 9 de marzo, en el Dispensario Santa Marta, en el Vaticano, tendrá lugar un encuentro entre algunos corredores del maratón y las personas asistidas en el Palazzo Migliori, que volverán a encontrarse, al estilo de la amistad, el viernes 17 para una cena todos juntos. El sábado 11, a las 8 de la mañana, habrá un entrenamiento para unos 200 corredores en la Plaza Pío XII y en Vía della Conciliazione, con la participación de los más pobres. Siempre con el objetivo de la inclusión, a través de la experiencia deportiva.
Entre otras iniciativas, la acogida de una madre maratoniana ucraniana, Viktoria Gudyma, relanzando la experiencia del maratón del año pasado. Viktoria, que huyó de Kiev bajo las bombas con su hijo Leo, que estará con ella en Roma, corre maratones para dar testimonio de un mensaje de paz también a través del deporte.
El sábado 18, a las seis de la tarde, el cardenal José Tolentino de Mendonça, prefecto del Dicasterio para la Cultura y la Educación, presidirá la Misa del Maratoniano en la Iglesia de los Artistas de la Plaza del Pueblo. Por último, el domingo 19, día del Maratón de Roma, a partir de las 8.45 horas, en la Plaza Pío XII habrá un sencillo punto de encuentro festivo – con la presencia de la Banda de la Gendarmería vaticana – con los pobres como protagonistas. También para la entrega de la Copa de los Últimos.
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