El Papa Francisco y Paolo Ruffini, Prefecto del Dicastero per la Comunicación El Papa Francisco y Paolo Ruffini, Prefecto del Dicastero per la Comunicación 

Paolo Ruffini a la 23ª Jornada Internacional San Francisco de Sales

Discurso de Paolo Ruffini, Prefecto del Dicasterio para la Comunicación de la Santa Sede, con motivo de la inauguración de la 23ª Jornada Internacional San Francisco de Sales

Ciudad del Vaticano

Este año se realizará otra edición de la Jornada Internacional San Francisco de Sales, del 30 de enero al 1 de febrero en Luordes, Francia.  Las Jornadas son organizadas por el Dicasterio para la Comunicación de la Santa Sede, la Federación de Medios de comunicación Católicos y Signis. También tendrán una dimensión internacional excepcional y permitirán encuentros e intercambios únicos. El cardenal Pietro Parolin entregará el Premio Jacques Hamel, en presencia de Roselyne Hamel, hermana del sacerdote asesinado.

Lo central en el periodismo: la verdad

El Prefecto comenzó su mensaje agradeciendo a los organizadores todos sus esfuerzos para la realización del evento. Recordó que el año anterior participaron más de 250 profesionales de la comunicación y este año esperan un número mayor. Citó al Papa Francisco para recordar lo central del periodismo:

“El Santo Padre nos recuerda que la comunicación sólo se logra en la realidad, aceptando la realidad, encontrándose con la realidad. Y eso es periodismo. También nos dice cuánto es construir y diseminar falsas creencias sobre la base de falsas representaciones de la realidad. Y eso no es periodismo”.

Comunicación para unir no para dividir

Ruffini recuerda que “se puede estar satisfecho con el paradigma tecnocrático, o se puede intentar construir un mundo más a escala humana a través de la comunicación, rompiendo el aislamiento que paradójicamente se alimenta de una conexión estéril, despojada de comprensión, solidaridad y ayuda mutua”.

Retomó el tema de las redes, éstas ayudan a generar contactos, pero no tienen raíces. “No son capaces de darnos la membresía, de hacernos sentir parte de la misma gente”. Es en las charlas, las reuniones, el contacto concreto cuando se crean raíces.

Paolo Ruffini afirma la importancia del diálogo: “El diálogo no puede ser nunca relativismo, sino logos para compartir, razón para servir en el amor y construir juntos una realidad liberadora. En esta dinámica, el diálogo revela la verdad y la verdad se alimenta del diálogo”.

Recuerda la importancia de la calidad de la comunicación: el “Papa Francisco nos invita, pues, a preguntarnos constantemente cómo nos comunicamos; nos empuja a preguntarnos: ¿nuestra comunicación siembra un futuro feliz de comunión o un futuro trágico de enfrentamientos y contrastes entre los hijos de Dios?”.

Los periodistas: buscadores de la verdad

 Ruffini afirma que “el Santo Padre define a los periodistas como "guardianes de la noticia" y "buscadores de la verdad". Los que se preocupan por la verdad están siempre atentos (precisamente para difundirla) a las reacciones de los que reciben la información, tratan de establecer un diálogo, escuchan los diferentes puntos de vista”.

También subraya que “los que buscan la verdad son humildes. Buscan la sustancia más allá de la apariencia. Nunca están satisfechos con los estereotipos. No están satisfechos con la respuesta más fácil, con un chivo expiatorio o con un autodenominado salvador de su patria”.

Centralidad de la compasión en las comunicaciones

Ruffini afirma que “la compasión es la mirada de los puros de corazón. Sólo ellos pueden ver a Dios. Que no son esclavos de su propio narcisismo. Y tratan de devolver a la unidad la complejidad de la realidad, fragmentada por nuestra pretensión de sustituir a Dios… En realidad, todos los días los medios de comunicación nos desafían a elegir entre el bien y el mal. Depende de cada uno de nosotros, como individuos y como grupos, elegir”.

Sobre esta temática profundiza: “cuando las imágenes, o la información, tienen el único propósito de inducir al consumo o manipular a la gente, nos enfrentamos a una agresión, a una emboscada. Acercarse a la verdad -explicó- sólo es posible si nos acercamos al otro. Pero pueden acercarse el uno al otro. Puedes elegir entre adoptar una ética y una estética constructiva: o una ética y una estética destructivas”.

Ser Influencer

Recordó las palabras del Papa Francisco: “ser un influenciador en el siglo XXI -dijo- significa ser los guardianes de nuestras raíces, los guardianes de todo lo que impide que nuestras vidas se vuelvan gaseosas y se evaporen en la nada. Guardianes de todo lo que nos permite ser parte de los demás. Y para devolverlo todo a la unidad en la verdad y la belleza original de nuestras vidas (Cf. Vigilia con los jóvenes, Metro Park, 26 de enero de 2019)”.

Finalizó su mensaje, dando las gracias de nuevo y “espero que nuestro estar juntos y reflexionar juntos nos ayude a dar forma a nuestra vocación como comunicadores católicos”.

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30 enero 2019, 14:42