Ciudad del Vaticano
Al término de la Audiencia General el Santo Padre recordó que el próximo 25 de enero, en países del Extremo Oriente y en varias partes del mundo, millones de hombres y mujeres celebrarán el Año Nuevo Lunar.
A todos ellos, el Papa envió su cordial saludo, con el deseo especial de que las familias sean "lugares de educación respecto a las virtudes de la acogida, la sabiduría, el respeto a cada persona y la armonía con la creación". El Pontífice también invitó a todos a rezar "por la paz, el diálogo y la solidaridad entre las naciones: dones tan necesarios para el mundo de hoy".