Víctima de trata. Víctima de trata. 

Trata de mujeres. Hermanas Oblatas confirman aumento de ayuda durante covid-19

Informe de atención a mujeres víctima de trata con fines de explotación sexual durante la crisis de Covid-19: “En esta situación de crisis, provocada por el COVID-19 aunque el consumo de prostitución en la calle y en algunos ámbitos cerrados disminuyó, no desapareció, más bien se readaptó a un nuevo escenario de confinamiento”.

Mireia Bonilla – Ciudad del Vaticano

Las hermanas Oblatas del Santísimo Redentor han presentado esta mañana el informe de atención a mujeres víctima de trata con fines de explotación sexual durante la crisis de Covid-19 y los proyectos sociales que están llevando a cabo en Europa, asegurando que este estado excepcional que se ha vivido en el mundo “afecta de manera significativa a este colectivo de mujeres, ya de por sí, con condiciones de vulnerabilidad”. El informe ha sido presentado de forma virtual a través de la plataforma Zoom por Begoña Vera Guanche, Marisa Cotolí Suarez y Magdalena Alomar Real, formadoras y trabajadoras sociales de los distintos proyectos que la Congregación tiene en España.

Prostitución durante el Covid: nuevos escenarios

En la rueda de prensa han asegurado que durante el estado de alarma los proyectos Sociales Oblatas de Europa han atendido a 2.759 mujeres que ejercen prostitución y/o son víctimas de trata con fines de explotación sexual, con 7.828 demandas y con 12.749 intervenciones. “En esta situación de crisis, provocada por el COVID-19 aunque el consumo de prostitución en la calle y en algunos ámbitos cerrados disminuyó, no desapareció” han puntualizado, de hecho – dicen – “más bien se readaptó a un nuevo escenario de confinamiento”.

Falta de recursos económicos: Oblatas ofrecen productos de primera necesidad

También han puesto de relieve los principales problema a los que estas mujeres vulnerables se han tenido que enfrentar, asegurando que el principal ha sido la falta de recursos económicos que ha supuesto la carencia de productos de primera necesidad. Los proyectos de la Hermanas Oblatas se han reinventado para dar respuestas a las nuevas demandas que la situación de crisis ha evidenciado y han respondido ofreciéndoles ayudas económicas para cubrir las necesidades básicas sobre todo de alimentación y alojamiento y ayudas en la tramitación de medidas económicas de urgencia.

También les han ofrecido un seguimiento telefónico para ver en qué situación se encontraban y cuál eran sus necesidades. “Nosotras dejamos de hacer la atención presencial e incrementamos el seguimiento telefónico a todas las mujeres que atendemos. Les hemos dado información sobre las medidas a seguir durante la crisis de COVID-19 para fomentar su protección y se les facilitaron materiales de protección desde mascarillas, guantes hasta gel hidro-alcohólico”. Además, explican, han incrementado la atención psicológica “ya que esta crisis ha tenido un impacto muy duro sobre ellas”.

El tema de la vivienda también ha sido otro de los problemas de las mujeres en este tiempo de pandemia. “La situación de precariedad y pobreza que sufren las mujeres se ha visto muy agravada por la crisis de covid 19” aseguran y el confinamiento – señalan – “ha aumentado la violencia y coacción”.

Llamamiento a una respuesta integral

Se trata de mujeres fundamentalmente migrantes, cuya procedencia principal es África, Latinoamérica y países del este. Mujeres que son víctimas de trata y que por su situación económica precaria se han visto obligadas a ejercer la prostitución. La Congregación de las hermanas Oblatas de Europa por último hacen un llamamiento en el que solicitan “la necesidad de una respuesta integral a las mujeres vulnerables” y aseguran que se debe hacer algo, “hay que ayudarlas para que ellas tengan alternativas”.

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09 julio 2020, 13:27