Escasez de alimentos en Venezuela Escasez de alimentos en Venezuela 

Venezuela. Mons. Padrón: Necesaria una pronta respuesta al hambre

El Presidente de la CEV subrayó que “el anuncio evangélico, si es íntegro, conduce a la liberación del pueblo de cualquier clase de opresión, política, social, moral o económica”, y que por lo tanto “la Iglesia, no es neutral ni en el anuncio ni en su praxis evangelizadora”.

Griselda Mutual - Ciudad del Vaticano

Se dio inicio en este 7 de enero a la CIX Asamblea Plenaria Ordinaria de la Conferencia Episcopal Venezolana en Caracas. Monseñor Diego Padrón, Arzobispo de Cumaná y Presidente de la CEV presidió la Ceremonia de Apertura con un extenso discurso. Tras los saludos al episcopado y a los representantes de las diversas instituciones, el exordio en el que recordó la alegre noticia de las prontas beatificaciones de la Madre Carmen Rendiles, y del Siervo de Dios Tomás Morales Pérez, y también el reconocimiento de que la Navidad pasada fue “una de las más tristes de la historia venezolana”, debido a la crisis que los pastores han tocado con mano en las diversas visitas a parroquias y comunidades.

Después de realizar el repaso de las actividades eclesiales que se llevaron a cabo en el 2017, y de hacer presente la inminente apertura del año jubilar de la Orden de la Merced el 17 de enero próximo y la visita ad Limina Apostolorum que realizarán en el mes de setiembre, Monseñor Diego Padrón se refirió al panorama nacional, con la mirada puesta ante todo en el sufrimiento del pueblo venezolano, que ha visto en el curso del año numerosas muertes, heridos y detenciones ilegales, escasez de comida y de medicinas e inflación flagrante.

El Obispo de Cumaná exhortó a no “resignarse o acostumbrase al mal que viene de las decisiones erradas, de la violencia, la injusticia o la mentira”. “La primera reacción –afirmó - ha de ser de rebeldía interior, como signo de ‘salud moral’”.

 

Fracaso del sistema político

 

“El sufrimiento actual del pueblo venezolano es de carácter ideológico, ético-político y económico”, expresó textualmente el Presidente de la CEV. “La raíz del sistema político que nos gobierna es el marxismo castrista, traducido en criollo como ‘Socialismo del Siglo XXI’, repetidas veces denunciado por nosotros, pastores, en nuestros documentos. De esa raíz ideológica nacen una política económica equivocada, científicamente desactualizada, técnicamente superada e históricamente fracasada en cuantos países ha sido lamentablemente aplicada, una organización política de manifiesta intención excluyente, una inclinación a perpetuarse en el poder y una política histórico-cultural y comunicacional de talante fiscal y centralizador”.

Tras recordar que “la Iglesia no tiene como tarea propia el cambio directo de las estructuras sociales y políticas por sí mismas en cada pueblo o nación sino, ante todo, el anuncio del Evangelio”,  subrayó que “el anuncio evangélico, si es íntegro, conduce a la liberación del pueblo de cualquier clase de opresión, política, social, moral o económica”, y que por lo tanto “la Iglesia, no es neutral ni en el anuncio ni en su praxis evangelizadora”.

Hoy en Venezuela, como en tiempos de Jesús, agregó Monseñor Diego Padrón, los oprimidos son la mayoría del pueblo, y por lo consiguiente, el anuncio evangelizador “no puede desentenderse de la suerte del pueblo ni dejar de apoyar todo lo que evangélica y legítimamente lleve a su liberación”.

Acerca del actual proceso de negociación política, cuya continuación está prevista en República Dominicana,  el prelado refirió que el mismo es en sí “válido y necesario”, pero observó por otra parte que “no tiene el favor mayoritario del pueblo”, debido a que el pueblo “no tiene confianza ni en los actores ni en la claridad de los objetivos ni en la consistencia de sus condiciones”. Y por ese motivo, el Presidente de la CEV expresa que es deseo de los obispos “que la negociación llegue a un acuerdo creíble, ponderado y realizable”. “Si la negociación no llega a un acuerdo- reiteró Mons. Padrón-  aumentarán la desilusión de la gente y la amenaza de que se suelten los demonios del poder”.

 

La caridad de Cristo urge a socorrer a los más necesitados

 

El Presidente de la CEV aludió sucesivamente a las  manifestaciones de protesta, con destrozos y saqueos de negocios, motivadas por el desabastecimiento de alimentos y gasolina, y puso en evidencia que el hambre de un pueblo “no se logra resolver estructuralmente ni con bolsas de comida, ni con bonos mensuales”:

“Estas son medidas de emergencia aplicadas en poblaciones que han sufrido grandes inundaciones, terremotos y tsunamis. Esas bolsas si, por una parte son un paliativo, por otra crean hábitos de mendicidad. A este desastre económico, cuyos nefastos resultados padecemos todos, sin distinción, se añade la más inescrupulosa corrupción en los dominios del oficialismo y en su vecindario dependiente”.  

En los últimos párrafos,  tras reconocer que los pronósticos son desalentadores en ese sentido, la CEV, en la persona de su Presidente recordó que es tarea de los venezolanos, encontrar la justa y pronta respuesta al hambre en la solidaridad:

“¡A los cristianos, la caridad de Cristo nos urge a socorrer a los más necesitados! (2 Co 5,14). Y nos obliga también en conciencia a evitar acciones que contribuyan a aumentar la violencia, dañar la propiedad ajena y responder con odio y con armas las injurias sufridas. El perdón y la reconciliación son la base de la solidaridad y la paz”.

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08 enero 2018, 16:06