Sant'Egidio: Fondos del Jubileo en ayuda para los que viven en la calle

Francesca Sabatinelli - Ciudad del Vaticano

Creación de un fondo de alquiler para los ciudadanos en situación de desahucio, que viven en condiciones precarias de vivienda y no pueden pagar su alquiler, utilizando parte de los fondos del PNRR para el Jubileo de 2025. Marco Impagliazzo, presidente de la Comunidad de Sant'Egidio, lanza la propuesta al gobierno de Meloni, porque este fondo - dice- "antes existía, ahora se ha anulado en la ley financiera, pero la gente sigue teniendo problemas con la vivienda y entonces, ¿por qué no pensar en esto como una gran obra social para el Jubileo?".

Dónde comer, dormir, lavarse

La ocasión para la propuesta es la presentación de la edición 2024 de la guía "Dónde comer, dormir, lavarse", 280 páginas de direcciones útiles para quienes viven en la calle, y sólo en Roma hay tres mil personas en la calle. Un mapa elaborado por voluntarios y por las propias personas que están en la calle de todos los lugares de acogida creados por muchas asociaciones, por parroquias, por Cáritas de Roma y también por Sant'Egidio. Una guía -dice Impagliazzo- que demuestra "que la solidaridad está viva y siempre necesita nuevos apoyos".

Alquileres calmados

La propuesta de la Comunidad de Trastevere es "lanzar una campaña de alquileres limitados" para poder hablar por fin de "una Italia que no deje a nadie atrás". Impagliazzo enumera los datos del ISTAT: 5.600.000 personas viven en la pobreza absoluta, alrededor del 10% de los italianos, una cifra que supone un aumento del 0,5% respecto al año pasado. Post pandemia, guerra en Ucrania, inflación, éstas son las causas de la dramática reducción del poder adquisitivo de familias enteras, pero también de personas solas, sobre todo, ancianos, "ciudadanos solteros para los que no hay fondos", explica Impagliazzo. Y es a ellos, sobre todo, a quienes se dirigen proyectos como el co-housing, "para la reinserción de las personas, de los que viven en la calle, de los que viven en la pobreza habitacional", un camino compartido que Sant'Egidio acompaña hacia la autonomía.

El valor del condominio protegido

La historia de Alessandro Ventricini cuenta precisamente esto: para él, la vida cambió al ir a un condominio protegido, "un edificio -explica- donde hay pequeños pisos en los que se vive en dos plantas. Hay personas que son, digamos, autónomas, que son capaces de gestionar por sí mismas las salidas, las cosas que hacer, la cocina, también porque estos pisos dan la posibilidad de cocinar. Luego hay un tercer piso donde viven personas que son un poco más discapacitadas y necesitan asistencia". La suya, como él mismo explica, es una vida de "persona un poco imprudente que no consideró bien las consecuencias que podían tener ciertas iniciativas que no salieron demasiado bien". Entrar en el condominio protegido cambió la vida de Alessandro, "porque recuperé un poco la identidad perdida en la calle".

Encontrar un hogar es volver a encontrar los propios derechos

Pobreza de la calle, pobreza educativa, pobreza sanitaria, pobreza de la soledad, las cifras son asombrosas, sólo en lo que se refiere a la pobreza infantil, se calcula que hay 1.300.000 menores en situación de pobreza absoluta en Italia, lo que, explica Impagliazzo, "significa no poder comer tres veces al día o haber perdido la relación con la escuela, el abandono escolar está ahí, o vivir en alojamientos precarios e improvisados". Encontrar un hogar significa redescubrir los propios derechos, porque todo está conectado - continúa el presidente de Sant'Egidio - 'hay personas que habían olvidado el derecho a una pensión social, y que nunca habían reclamado este derecho, personas que no tenían tarjeta sanitaria y por lo tanto no se cuidaban, no disfrutaban del sistema nacional de salud, todo está conectado, todo empieza por encontrar un hogar'.

La campaña #Natalepertutti

También este año, Sant'Egidio lanza la campaña #Natalepertutti, la petición es regalar la Navidad a los necesitados, "poniendo una mesa lo más amplia posible el día de Navidad para las muchas personas en situación de pobreza o solas, porque la soledad -añade Impagliazzo- es un problema enorme en Italia, sobre todo, para los ancianos". La campaña puede apoyarse hasta el 26 de diciembre, a través del número 45586, para garantizar la Navidad a unas 250.000 personas en 70 países de todo el mundo.