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El Papa Francisco junto al Card. Béchara Boutros Raï, en una foto de archivo El Papa Francisco junto al Card. Béchara Boutros Raï, en una foto de archivo 

Líbano. Comenzó el Santo Sínodo anual de la Iglesia Maronita

En el centro del Sínodo, el nombramiento de nuevos obispos, los asuntos pastorales y la crisis política.

Liza Zengarini – Ciudad del Vaticano

Ayer, en la sede patriarcal de Bkerké (Líbano), se inauguraron los trabajos del Santo Sínodo anual de la Iglesia Maronita, presidido por el Patriarca Cardenal Béchara Raï. En la agenda - informa el diario libanés l'Orient-le-jour - la elección de tres nuevos obispos, así como cuestiones pastorales y otras relativas a la actual situación política del país. La sesión fue precedida por un retiro espiritual de seis días.

Las sedes episcopales que se cubrirán son las de Kornet Chehwan, tras la muerte del arzobispo Camille Zeidan, y las de Trípoli y Tiro. Los nombramientos se anunciarán en la declaración final al final de la reunión, el sábado 31 de octubre.

Durante los trabajos, el Sínodo examinará cuestiones de carácter litúrgico y la formación de los seminaristas. A esto se añadirán algunos aspectos relacionados con la pastoral social en la Iglesia Maronita. A este respecto, el Patriarca Raï se ha comprometido a adoptar un plan global complementario al que ya está en vigor en las instituciones maronitas comprometidas en este ámbito, con especial referencia a Caritas Líbano.

Por último, la asamblea hará un balance de la situación del país tras el encargo de la semana pasada en Saad Hariri para la formación del nuevo gobierno, sobre el que todas las partes están de acuerdo, dada la situación crítica en la que se encuentra el país. Una necesidad enfatizada también por el Cardenal Raï: "El Líbano necesita un ejecutivo independiente, entre cuyas tareas se encuentre la de reconstruir la autoridad a través de un proceso constitucional, democrático y pacífico". El nuevo ejecutivo, añadió el Patriarca, debe "ser diferente de todos los que lo precedieron, para luchar contra la pandemia del coronavirus (...) y hacer frente a la crisis financiera y bancaria, (...) a la dilapidación de los fondos públicos, al aumento de la corrupción y garantizar la independencia del poder judicial".

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28 octubre 2020, 09:50