Chile. Obispo Sergio Pérez: participar en plebiscito sobre reforma constitución

El obispo de la diócesis San Bartolomé de Chillán, Sergio Pérez de Arce Arriagada, conversa con Vatican News sobre el impacto que el coronavirus tiene en esta región al sur de Chile y la importancia de la participación de los ciudadanos en el plebiscito sobre la necesidad de una nueva Constitución que tendrá lugar el próximo 25 de octubre.

Manuel Cubías – Ciudad del Vaticano

La diócesis San Bartolomé de Chillán está situada a unos 400 kilómetros al sur de Santiago, la capital chilena. La ciudad de Chillán es la más poblada de la región de Ñuble, y al igual que las grandes ciudades, está rodeada por comunidades de gente muy pobre, la mayor de las veces, procedentes de zonas rurales. El obispo Sergio Pérez de Arce, describió la diócesis como una zona de alta ruralidad, pobreza y con trabajos que se pueden calificar de precarios.

El coronavirus en la vida de Chillán

En relación a cómo se vive en esta zona la pandemia, afirmó que han vivido en cuarentena varios meses y en diversas modalidades, como en el resto del país. “Esto provocó consecuencias sociales y económicas por la falta de trabajo y por el alto número de contagios”. Hay muchas personas fallecidas lo que ha generado en las familias tristeza, subrayó el obispo, así como explicó que esta situación generó una fuerte presión sobre el sistema de salud; sin embargo, “No hemos llegado a tener un colapso, gracias a Dios”.

El obispo Sergio Pérez de Arce resaltó que en esa región “la gente tiene un trabajo precario, no contratado. Trabajan en el comercio y en el campo como temporeros y en la medida en que el trabajo está suspendido, esto provoca una fuerte necesidad económica”. Añadió que el Estado ha aliviado en parte a la población gracias al paquete de subsidios, pero, “obviamente la gente la está pasando mal”.

La necesidad que viven muchos ha permitido generar una dinámica de solidaridad en las parroquias. “Solo en la ciudad de Chillán hay veinte ollas comunes. Les llamamos comedores solidarios y se organizan en torno a las capillas, donde la comunidad cristiana, juntas de vecinos y clubes deportivos se unen, con apoyo del Estado, para intentar paliar el hambre”.

En relación a cómo vive la población el confinamiento, el obispo insistió que no ha sido fácil: “nos cuesta estar encerrados y tener disciplina, pero diría que finalmente estamos pasando la etapa más dura”.  A pesar del descenso en los contagios, al obispo le preocupa la pérdida de empleos y la recuperación económica de las personas más pobres.

La atención sanitaria para el Covid-19 está centrada en el hospital de Chillán, que es el nosocomio más grande de la zona.

Invitación a la participación ciudadana

El obispo de Chillán, Sergio Pérez de Arce, recordó que el país se enfrentará el próximo 25 de octubre a un plebiscito decisivo, por lo cual invitó a reforzar el sentido colectivo. Junto con los obispos chilenos, llama a   vencer comodidades, indolencias y temores, y aportar con nuestra opinión y compromiso a la edificación de la patria. Invitamos, sobre todo, a promover caminos de diálogo, con respeto, sin descalificaciones, sabiendo que la patria se construye en forma compartida, en base a valores esenciales que, estoy seguro, la gran mayoría del país comparte”, aseguró.

Monseñor Sergio Pérez de Arce insistió que esta consulta llega en un momento en que la situación socioeconómica y política del país pasa por un momento difícil. En los últimos meses del año pasado “hubo un estallido social, es decir, una expresión masiva de demandas y de insatisfacción”. Y aunque ha habido mejoras en la reducción de la pobreza, “se ha mantenido una estructura social muy desigual, con mucha inequidad”. El prelado puso el ejemplo de las pensiones y dijo: “son bajas en general”. Aunque hay ciertos subsidios del Estado, la percepción de la población es “que en el fondo el desarrollo y el progreso no ha llegado suficientemente y como debiera a una parte importante de la población, especialmente a los más vulnerables”, afirmó.

El obispo de Chillán subrayó que existe un gran descontento de los ciudadanos con la clase política “que muchas veces viven desconectados de la realidad que vive la población. Hay una crítica a las instituciones en general en Chile y entre ellas, también la Iglesia”.

Necesidad de un nuevo marco jurídico

El obispo de Chillán, Sergio Pérez de Arce dijo que es importante la discusión sobre la necesidad de una nueva Constitución que sea el marco jurídico que exprese “las grandes líneas del país que queremos, por eso es una buena oportunidad para conversar y llegar a un acuerdo sobre los valores fundamentales que queremos vivir”. El prelado recordó las palabras que dijo el Papa Francisco a propósito de la pandemia: nadie se salva solo. “Nos necesitamos unos a otros y hago un llamado a participar masivamente en el debate”, afirmó.

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03 octubre 2020, 16:17