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Jornada de la Juventud ecuménica sobre el tema de la salud mental

El bienestar psicofísico, especialmente entre los adolescentes, amenazado por la ansiedad y la depresión. Hablar de ello no debe ser tabú. Este es el tema elegido por la segunda edición del evento organizado totalmente online por el Consejo Ecuménico de Iglesias (CMI) para seguir destacando la importancia de la participación de los jóvenes en el desarrollo de la sociedad.

Gabriella Ceraso - Ciudad del Vaticano

Con un denso programa de charlas y oraciones "virtuales", se desarrolla hoy la Jornada Internacional de la Juventud Ecuménica, organizada por el Consejo Mundial de Iglesias (CMI), totalmente online. El tema de este año es "Juventud y Salud Mental". Se trata de una iniciativa que está ahora en su segunda edición después de la del año pasado en Ginebra, que mostró cómo y cuánto pueden contribuir los jóvenes al tratamiento de las cuestiones que más les interesan. La idea nació del Día Internacional de la Juventud  establecido en 1999, el 12 de agosto, por las Naciones Unidas con el fin de destacar la importancia de la participación de los jóvenes para el desarrollo de la sociedad.

 

Asimismo, el CMI tiene en programa un momento de oración virtual y charlas con expertos; a la vez que ha preparado un folleto para que las iglesias locales puedan preparar estos eventos. Para comprender mejor los objetivos, modalidades y antecedentes de esta participación juvenil, hablamos con el Hno. Lawrence Iwuamadi, decano del Instituto Ecuménico de Bossey en Ginebra, nacido en el Consejo Ecuménico de Iglesias, para promover el diálogo y el encuentro entre los miembros de las diferentes Iglesias cristianas:

- ¿Cuál es el propósito de esta jornada ecuménica que hoy llega a su segunda edición?

R. - Desde el año 2000, las Naciones Unidas han declarado el 12 de agosto Día Internacional de la Juventud con el objetivo de concienciar a los jóvenes del mundo sobre los problemas que les preocupan. Todas las organizaciones juveniles están invitadas a destacar los esfuerzos de los jóvenes para crear un mundo mejor. Y el Consejo Ecuménico de Iglesias, por su parte, lanzó el año pasado el Día Internacional de la Juventud Ecuménica en Ginebra. Y esto fue para resaltar las contribuciones de los jóvenes en el movimiento ecuménico.

El evento fue organizado en colaboración con la Federación Luterana Mundial y la Federación Mundial de Estudiantes Cristianos. La organización del año pasado tuvo un verdadero éxito con decenas de participantes y conexiones online también con los jóvenes del Movimiento Ecuménico de la península coreana para caminar y orar juntos por la justicia y la paz en la península.

- ¿Por qué se eligió este año el tema de la salud mental en relación con los jóvenes?

R. - Tras el éxito del Día Internacional de la Juventud Ecuménica del año pasado, este año el Consejo Ecuménico de Iglesias decidió abordar el tema de la salud mental. Y esto es el resultado de varias recomendaciones de los propios jóvenes dentro y fuera de las redes del Consejo Ecuménico que han señalado el tema como una de las cuestiones urgentes a explorar. La Organización Mundial de la Salud define la salud mental como un estado de bienestar en el que cada individuo realiza su potencial y puede hacer frente a las tensiones normales de la vida y también trabajar de forma segura y fructífera haciendo una contribución a su comunidad. El bienestar incluye aspectos emocionales, psicológicos y sociales. 

Por tanto, prestar atención a estas tres dimensiones puede aumentar e incluso mejorar la salud mental, mientras que descuidarlas puede conducir a graves problemas. Como sabemos, los trastornos mentales muestran una amplia gama de manifestaciones en pensamientos, emociones, comportamiento y relaciones con los demás. La ansiedad y la depresión son los trastornos mentales más comunes y, junto con los problemas de salud mental, están aumentando entre los adolescentes y los adultos jóvenes. Los investigadores apuntan a la tensión cultural como la causa de este aumento. No sólo eso, sino que los trastornos mentales son la principal causa de discapacidad entre los jóvenes. Por eso hemos elegido este tema para que los jóvenes también puedan aprender más sobre él, también porque en algunas zonas del mundo el tema es, por desgracia, tabú y tenemos que hablar de él.

- ¿Pero los jóvenes viven el ecumenismo?

R.- Sí, los jóvenes viven el ecumenismo. Ellos, como parte importante de la Iglesia y las comunidades cristianas, siguen estando a la vanguardia del movimiento ecuménico. Para mí, que enseño en el Instituto Ecuménico de Bossey, responder a esta pregunta es simple. Porque todos los días veo a jóvenes aquí en Bossey que están interesados en participar en el Movimiento Ecuménico: hay interés, compromiso y voluntad de enfrentarse y esto es importante.

Vivimos en una época que muestra cada vez más el riesgo de encerrarse y pensar sólo en sí mismo, esto es cierto, pero también hay muchos jóvenes que quieren ir más lejos, conocer a otros. Siempre digo que el ecumenismo es una invitación a encontrar al otro y este es también el pensamiento del Papa que, cada vez que habla de ecumenismo precisamente, devuelve la imagen del encuentro con el otro. Aquí, desde este punto de vista, hay interés y compromiso por parte de los jóvenes.

- ¿Cómo animar a los jóvenes, cómo guiarlos para que aprovechen al máximo sus energías, sus pasiones?

R.- El Papa Francisco en 2018 dirigió unas importantes palabras a los delegados de la reunión de la juventud presinodal, diciéndoles que no son los adultos, ni los que se sienten jóvenes los que deben decir a la Iglesia cómo dirigirse a los jóvenes y a su generación. Sino que son los propios jóvenes los que deben hacerlo. De estas palabras del Papa, sacamos varias pistas importantes. Debemos dar espacio a los jóvenes, porque sólo así pueden demostrar lo que tienen dentro de sí mismos. Y de nuevo, debemos tener en cuenta su punto de vista, lo que piensan, especialmente al tomar decisiones que les conciernen.

Debemos reconocer su entusiasmo, su energía, sus pasiones. Sólo reconociendo esto podremos mostrarles cómo sacar el máximo provecho de lo que llevan dentro. Entre otras cosas, debemos encontrar la mejor manera de facilitar la comunicación con la juventud, y esto es muy importante, especialmente cuando hay que tomar decisiones que les conciernen. Sólo así podremos guiarlos para animarlos de la mejor manera posible.

 

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12 agosto 2020, 19:00