Buscar

Cuba pospone la II Asamblea Misionera para agosto 2021. Cuba pospone la II Asamblea Misionera para agosto 2021. 

La Iglesia en Cuba pospone la II Asamblea Misionera para agosto 2021

A causa de la pandemia, la Iglesia cubana se ve obligada a suspender el Año Misionero y pospone la II Asamblea Misionera Nacional para la semana del 3 al 7 de agosto del 2021.

Alina Tufani – Vatican News

Una breve pero sentida misiva la del arzobispo de La Habana, el cardenal Juan de la Caridad García Rodríguez que como presidente de la Comisión Nacional de Misiones anuncia una nueva fecha para la II Asamblea Misionera Nacional que se realizará del 3 al 7 de agosto del 2021. La pandemia de Covid-19, que como en todas partes del mundo, ha golpeado también a la isla caribeña ha dejado suspendido este Año Misionero que se había declarado en 2019 y que concluiría justamente el próximo mes de agosto con la II Asamblea Misionera.

“Damos gracias al Espíritu Santo que nos ha acompañado e iluminado en las distintas asambleas misioneras desde las casas de misión, comunidades, parroquias, vicarías, hasta llegar a las asambleas diocesanas” expresa el purpurado cubano al asegurar que ha sido una riqueza descubierta por los misioneros con la luz del Espíritu Santo y que deben “hacerla crecer  con la “oración, la reflexión y la actividad misionera”.

El Año Misionero fue declarado por los obispos cubanos al concluir la Jornada Nacional de la Juventud 2019, bajo el lema  “Cuba, ¡anuncia el Evangelio con alegría”. Convocado por la Comisión nacional de Misiones de la Conferencia de Obispos Católicos cubanos, el Año Misionero tuvo como objetivo fortalecer la actividad misionera de todas las comunidades, con el anuncio de Jesucristo y en preparación de la II Asamblea Misionera Nacional.

Ante las difíciles circunstancias que vive el planeta, el cardenal García Rodríguez exhorta a unirse en oración para que los frutos de las asambleas diocesanas se continúe llevando a todos los rincones de la isla.  “Profundizar en las prioridades, creciendo en las fortalezas y en las debilidades, esperando que el Espíritu Santo, reparta sus siete dones en todos los misioneros y entre hasta el fondo de nuestras almas”, concluye el arzobispo de La Habana.

Gracias por haber leído este artículo. Si desea mantenerse actualizado, suscríbase al boletín pulsando aquí

25 mayo 2020, 09:45