Libia en un largo proceso de paz y reconciliación Libia en un largo proceso de paz y reconciliación 

Libia en medio de divisiones. Monseñor Bugeja: “la situación no es fácil”

La Conferencia Internacional sobre Libia, celebrada el 19 de enero, pretendía detener la guerra que el país africano vive desde hace casi nueve años. Monseñor George Bugeja, Vicario Apostólico de la Diócesis de Trípoli (Libia), habló, en una entrevista con la Fundación Pontificia internacional Ayuda a la Iglesia Necesitada, sobre la situación actual del país de África del Norte y las expectativas de la Iglesia en el proceso de paz.

Ciudad del Vaticano

“En Libia hay profundas divisiones, las partes en conflicto están muy alejadas, incluso es difícil para ellos sentarse a la mesa para hablar la situación”. Es así como Monseñor George Bugeja, Vicario Apostólico de la Diócesis de Trípoli, describe la situación de Libia, destacando que el acuerdo al que se llegó en la Conferencia de Berlín, celebrada a mediados de enero, fue muy positiva en este proceso de paz y reconciliación, pero la situación “no es fácil”.

La Conferencia Internacional sobre Libia

Desde la Primavera Árabe de 2011, Libia se encuentra en estado de guerra: las fuerzas del gobierno se enfrentan a las milicias, pero, tanto las unas como las otras, están apoyadas por potencias extranjeras. Con la Conferencia de Berlín se pretendía lograr un avance definitivo, pero los acuerdos más importantes no se mantuvieron ni siquiera una semana.

En unas declaraciones para “Ayuda a la Iglesia Necesitada” (ACN), el Vicario Apostólico de Trípoli explicó que los países que participaron en la Conferencia de Berlín sobre Libia deberían ahora “hablar con una sola voz para poner en práctica lo que se decidió en aquella ocasión”, ya que, aun después del acuerdo de alto el fuego, Libia sigue presenciando un clima de violencia.

Refugiados: solucionar problemas de origen

En cuanto a los refugiados que emigran de Libia a Europa, el Prelado señaló que el problema no viene propiamente del país africano, de hecho, dice que la oleada de refugiados viene del África subsahariana. En este sentido, Monseñor Bugeja considera que, para solucionar este problema migratorio, primero hay que solucionar los problemas dentro de estos países.

La Iglesia, un signo de aliento

El Purpurado también afirmó que la presencia de la Iglesia, la cual en Libia es una minoría, ha sido y seguirá siendo “un signo de aliento para todos los que vienen a la iglesia”. A pesar del duro conflicto, sacerdotes y personal de la Iglesia católica han permanecido en el país, incluso, la Iglesia en Trípoli ha podido desarrollar pequeños centros de atención humanitaria.

“El Mediterráneo, frontera de la paz”

Del 19 al 23 de febrero, los obispos de la Cuenca del Mediterráneo celebrarán el encuentro sinodal “El Mediterráneo, frontera de la paz”, en Bari, Italia, a la cual el prelado espera participar, para poder dialogar con los demás Obispos, conocer la situación que se vive en cada Diócesis y así aprender y apoyarse los unos a los otros.

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13 febrero 2020, 14:10