Obispos colombianos piden al ELN manifestaciones de su voluntad de paz

Griselda Mutual - Ciudad del Vaticano

“Invitamos a la guerrilla del ELN a una seria reflexión sobre sus graves acciones”. Reiterando que “toda vida humana es sagrada y tiene una misión importante”, los obispos colombianos rechazaron “el asesinato de los líderes que ha enlutado casi todo el territorio nacional”; y dirigiéndose de manera directa a la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional, pidieron a la misma “manifestaciones inequívocas de su voluntad de paz”. Exhortaron a la guerrilla a abandonar las armas, y a sumarse al esfuerzo "de tantos hermanos que han dejado el camino de la violencia y se integran a la lucha por una paz verdadera". La declaración fue realizada al término de la Centésima Séptima Asamblea Plenaria del Episcopado colombiano en el viernes 8 de febrero. 

ELN realice “manifestación inequívoca” de su voluntad de paz

Los prelados manifestaron la necesidad de perseverar en la construcción de la reconciliación y de la paz: “es necesario que asumamos la cultura del encuentro”, que se fundamenta “en la defensa de la vida y en el rechazo del imperio nefasto de la muerte que se refleja especialmente en el terrorismo, en las diversas formas de violencia – incluso en las familias – en el narcotráfico, en la inseguridad que se ha empoderado de los campos y ciudades”, dijeron. Pidieron al ELN "manifestaciones inequívocas de su voluntad de paz", y a las organizaciones armadas ilegales, solicitaron que abandonen “su accionar delictivo”.

Corrupción incrustada en la cultura del pueblo

Además constataron que la corrupción se ha “incrustado” en la cultura del pueblo colombiano, tocando la “vida política, económica y social” del país, convirtiéndose en uno de los “más graves flagelos que impide el progreso de las regiones y destruye la confianza en las instituciones”.

En este sentido, al recordar que en el año que corre tendrá lugar un nuevo proceso electoral, invitaron al pueblo colombiano a ejercitar “libre y responsablemente el voto”, para vencer los vicios de la política que, como dice el Papa “socavan el ideal de una democracia auténtica, son la vergüenza de la vida pública y ponen en peligro la paz social”.

Imperativo superar desigualdades sociales

Por último realizaron una llamada a la solidaridad y al servicio hacia los pobres, los marginados y los migrantes, un imperativo para que la sociedad colombiana supere las “profundas desigualdades que existen entre los hermanos de una misma nación” y que resulta urgente ante la “clamorosa situación de hermanos venezolanos” que llegan a Colombia.