Cartoneros en las villas de Argentinas. Cartoneros en las villas de Argentinas. 

Curas villeros contra la nueva ley de basura que afecta a los cartoneros

Los sacerdotes que trabajan en las villas argentinas, han mostrado su preocupación ante la nueva ley de gestión de residuos urbanos que afecta directamente a los "recicladores callejeros"

Sofía Lobos - Ciudad del Vaticano

El proyecto oficial para modificar la ley de Basura Cero en Argentina, que establece nuevos plazos para reducir la cantidad de residuos enviados a predios de disposición final y habilita, además, la instalación de plantas de incineración, continúa generando controversias y no sólo entre las agrupaciones ambientalistas.

También los sacerdotes que trabajan en villas de la ciudad de Buenos Aires, conocidos como "curas villeros", plantearon, a través de una carta, su preocupación por los efectos sociales que tendría la medida, principalmente por cómo afectaría a los recicladores, "cartoneros", y a las cooperativas que basan su economía popular en la recuperación de los residuos.

El futuro de los cartoneros

 

"Es preocupante si se quema el material reciclable, ya que muchos cartoneros lo necesitan para ganarse su medio de vida, su sustento", se lee en el documento, enviado a los legisladores regionales y difundido a toda la comunidad. 

"Las iniciativas de organización comunitaria de cartoneros y otros rubros, por el compromiso que tienen, logran incluir a muchas personas y familias que una empresa privada no podría contener", sostiene la carta, redactada por el presbítero Lorenzo de Vedia -sacerdote de la villa 21-24, de Barracas, conocido como el padre Toto- y refrendada por otros 19 curas villeros y el vicario para las villas de la ciudad, Gustavo Carrara. 

Hace un mes, el proyecto impulsado por el Poder Ejecutivo ingresó en la Legislatura y esta semana obtuvo dictamen de comisión, previo paso al recinto. La polémica se desató debido a que la propuesta abriría las puertas a las plantas de termovalorización, es decir, incineración con recuperación de energía y esto afectaría a miles de personas que se ganan la vida trabajando en el reciclado callejero de la ciudad.


Los recicladores urbanos no son usurpadores

 

El escrito, continúa afirmando que los llamados "recicladores urbanos", de hecho, "no son usurpadores, sino que han transformado vertederos de basura y lugares abandonados en barrios de clase trabajadora", hecho que ha podido demostrar "cuántos trabajadores y pequeños empresarios de la economía popular saben cómo organizarse, pasando de ser "esclavos marginados y excluidos, a personas con la dignidad de trabajadores, ayudando así a evitar, entre otras cosas, la explotación del trabajo infantil".

La carta también destaca la creación de la Dirección General de Reciclaje y advierte sobre el impacto ambiental de los nuevos incineradores.

Y, citando algunos pasajes del Papa Francisco sobre el tema del trabajo y el papel de los movimientos populares, concluye que la nueva ley representaría un "gran paso atrás". 

Carta de los Curas Villeros

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03 mayo 2018, 18:31