Cardenal Roche: inmensa tristeza por el fallecimiento de la Reina

Vatican News

En un breve mensaje tras conocer la noticia del fallecimiento de la reina Isabel II, el cardenal británico Arthur Roche, Prefecto del Dicasterio para el Culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos, recorre la figura de la soberana y expresa los sentimientos de condolencia de todos los que trabajan en la Santa Sede y que proceden de Gran Bretaña, Irlanda del Norte y los países de la Commonwealth. Su declaración subraya que la difunta Reina se dedicó "sin descanso al servicio de su pueblo, pero también lo confió a la protección de Dios".

A continuación, la declaración completa:

"Quienes trabajamos en la Santa Sede y procedemos de Gran Bretaña, Irlanda del Norte y los países de la Commonwealth, hemos recibido con inmensa tristeza la noticia del fallecimiento de Su Majestad la Reina Isabel II.

Desde su ascenso al trono en 1952, tras la muerte de su padre, el rey Jorge VI, no sólo se dedicó sin reservas a servir a su pueblo, sino que lo encomendó a la protección de Dios.

Su fe cristiana, expresada muchas veces en sus mensajes anuales de Navidad y en otras ocasiones, fueron momentos de extraordinario testimonio de su fe, del Evangelio y de los valores del bien común, la vida familiar, la paz y la concordia entre los pueblos.

Su amabilidad y empatía con la gente, sus dotes de estadista y su amor por su pueblo en los numerosos países, culturas y religiones de la Commonwealth dan testimonio de un vínculo ininterrumpido y único de dedicación al servicio de los demás. Ha sido muy amada por todos.

Siguiendo la promesa que hizo en su famoso programa de radio a la edad de 21 años en 1947, se mantuvo firme hasta el momento de su muerte, cumpliendo sus propias palabras: 'Declaro ante todos vosotros que toda mi vida, sea larga o corta, estará dedicada a vuestro servicio'".

Que descanse en paz

Cardenal Arthur Roche